El término ‘reincorporación’ (reboarding) consolidó su estatus en el vocabulario de recursos humanos durante la pandemia de COVID19, cuando las empresas comenzaron a pedir a los equipos que regresaran al trabajo de oficina, dejando atrás las configuraciones de sus hogares. Si bien algunas empresas no lograron un enfoque coordinado y terminaron con un retorno caótico, otras utilizaron con éxito el reboarding como una herramienta estratégica para impulsar el compromiso y la productividad.
Sin embargo, el concepto de reboarding para los empleados que regresan no se limita a eventos que alteran la vida, como una pandemia. Al observar todo el ciclo de vida de los empleados, hay muchos momentos en los que un enfoque inspirado en el reingreso puede agregar valor tanto a los trabajadores como a la organización en general.
La pregunta es, ¿cómo podemos aplicar los aprendizajes del regreso al trabajo tras el fin de los confinamientos por la pandemia a otros escenarios de reincorporación durante el mandato de un empleado?
Por qué es importante el reboarding
Primero, demos un paso atrás y exploremos por qué la reincorporación es una de las transiciones clave de los empleados.
De manera similar a la incorporación, el objetivo principal de un buen proceso de reboarding es ayudar a los empleados a navegar por el cambio y familiarizarse con un nuevo tipo de equipo, organización o contexto de trabajo.
Si bien no todo habrá cambiado después de un período de ausencia, sin duda habrá cosas que serán diferentes. Ese colega que solía ser un socio crucial en los proyectos puede haber dejado la empresa. El líder del equipo puede haber obtenido un ascenso, dejando al empleado que regresa con un nuevo gerente. O la empresa podría haber cambiado su dirección estratégica en ese tiempo.
Todos estos cambios pueden parecer pequeños en primera instancia, pero pueden afectar significativamente la experiencia del empleado que regresa durante el reingreso. Mejorarán o dañarán el compromiso, el tiempo de productividad y la retención.
El reboarding brinda a la organización otra oportunidad de crear una ‘experiencia del primer día’ memorable, preparando al empleado que regresa para el éxito. Y al igual que con la incorporación, esta es una oportunidad perfecta para que Recursos Humanos y los gerentes agreguen valor al proceso y den vida a la marca de empleador.
Tipos de reboarding
A decir verdad, no existe un enfoque único para volver a incorporar a un empleado. Un período de ausencia, ya sea breve o un escenario a largo plazo, siempre será un evento importante e impactante para el miembro del equipo.
En términos generales, hay 3 factores que afectan tanto lo que se puede esperar de un empleado que regresa como el tipo de viaje de regreso a implementar para apoyar al personal:
Motivo de la ausencia
El absentismo puede haberse producido por tomar el empleado un año sabático planificado o padecer una enfermedad repentina, que afecta la capacidad emocional y física de este durante la ausencia y la reintegración.
Duración de la ausencia
Cuanto más tiempo esté un empleado ausente de la organización, mayor será la desconexión con el trabajo, el equipo y la cultura empresarial.
Capacidad de retorno
Ya sea que un miembro del equipo regrese a tiempo completo o siga un cronograma de reintegración, construye la columna vertebral de cómo se le puede apoyar mejor.
Escenarios típicos de reboarding
Si bien la causa y la duración de la ausencia, así como la capacidad de retorno, hacen que cada período de absentismo sea único, existen varios escenarios típicos que probablemente surjan cuanto más tiempo pase un empleado en la organización.
Regreso al trabajo tras una baja maternal/paternal
Cuando los empleados están de baja porque se están convirtiendo en padres, su vida va a cambiar significativamente. Normalmente se trata de un permiso planificado que puede ser cubierto por otros compañeros o con profesionales interinos. La duración de la baja se rige legalmente, por lo que las organizaciones pueden planificar el trabajo y los proyectos con anticipación.
Se recomienda proporcionar flexibilidad para que el empleado que regresa, ahora padre, se adapte a su nueva circunstancia de vida. Hay que pensar en acuerdos de trabajo híbridos y evaluar el desempeño en función del trabajo producido, en lugar de las horas invertidas.
Regreso al trabajo tras una baja por agotamiento o burnout
Volver a incorporar a los empleados que regresan de una ausencia después de padecer burnout es un proceso crucial, ya que la mayoría de las veces, al menos parte de la razón de la ausencia se encuentra dentro del entorno de trabajo en sí. Aunque este proceso a menudo está guiado por procedimientos legales y profesionales médicos, las organizaciones juegan un papel importante en la evaluación de los roles laborales y las estructuras de los equipos para mejorar.
Es recomendable alentar a los gerentes a reunirse con frecuencia y adaptar el trabajo a lo que el miembro del equipo puede lograr, en lugar de lo que dice la descripción del trabajo.
Reboarding tras las vacaciones
Cuando el personal ha estado ausente de su función por un período de tiempo corto a mediano debido a un viaje planificado o un año sabático, el objetivo es ponerlos al día sobre los cambios en la organización y volver a estar al tanto de sus proyectos antes de su partida. Un buen proceso de reboarding ayuda a recuperar el rol y desempolvar su conjunto de habilidades, listo para comenzar a trabajar desde el primer día de su vuelta.
Hay que facilitar una transferencia inversa de los empleados que se hicieron cargo de los proyectos durante la ausencia del trabajador.
Reincorporación tras una baja por enfermedad
Un buen proceso de reboarding para los empleados que se reintegran después de una baja por enfermedad otorgará la máxima prioridad al aspecto emocional del trabajo y generará comodidad y confianza dentro del equipo. Cuanto más larga sea la ausencia, mayor será la distancia psicológica entre el empleado y el trabajo, e incluso los hábitos más normales de un día de trabajo típico pueden parecer desalentadores al principio. Según el motivo específico de la baja, las limitaciones físicas pueden afectar cómo y qué tipo de trabajo puede realizar un empleado.
Se recomienda formar a la dirección sobre cómo manejar a los empleados que regresan con empatía e inteligencia emocional.
Y tú, ¿has pasado por alguno de los procesos mencionados antes de someterte al reboarding de la empresa?