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Los Knowmads son los trabajadores del conocimiento nómada. Se trata de personas creativas, imaginativas e innovadoras que pueden trabajar con casi cualquier persona, en cualquier momento y en cualquier lugar.
El concepto de Knowmads se originó en junio de 2009 a partir de las experiencias de profesionales del campo de la educación que hicieron algo diferente a la hora de enseñar a sus alumnos. Apostaron por la combinación de la educación tradicional con programas menos tradicionales.
El término Knowmads fue acuñado por John Moravec, a quien se considera un maestro futurista y nómada que actualmente ejerce en la Universidad de Minnesota. Le encantó la idea de una escuela que no se basara en un lugar o un edificio, sino que se ubicara donde el estudiante pudiera y quisiera contribuir a un proceso o proyecto.
Los Knowmads son pioneros internacionales que quieren desafiarse a sí mismos y al mundo exterior. Gente que quiere cambiar las reglas del actual mercado laboral.
Estos profesionales nómadas de la economía del conocimiento se encuentran en su elemento bajo la incertidumbre y la ambigüedad. Saben cómo extraer valor de sus conocimientos, habilidades, capacidad de aprendizaje, capital social y pasiones. Pero no encajan bien en contextos organizativos jerárquicos y burocráticos donde se sienten limitados por estructuras, procedimientos y reglas que a menudo dejan poco espacio para la iniciativa personal y la creatividad.
Por esa razón, y debido a que normalmente tienen más oportunidades de encontrar un trabajo alternativo que sus colegas, los Knowmads no duran mucho en este tipo de entornos laborales. Los empleadores terminan acusándoles de desleales. Pero lo que realmente sucede es que, para los Knowmads, la palabra lealtad significa algo muy diferente.
La lealtad incondicional que muchas empresas siguen demandando de sus empleados es algo que simplemente no encaja en sus esquemas. Las descripciones interminables de funciones de un puesto, los líderes que valoran más el estar presente en la oficina, la microgestión, la ausencia de meritocracia y la lenta toma de decisiones les ahogan.
Por todo ello, los Knowmads han dejado atrás los trabajos estándar heredados de la era industrial. Buscan proyectos que se ajusten a sus pasiones y su necesidad de encontrar significado en lo que hacen. La forma en que trabajan refleja el deseo de hacer bien su trabajo por sí mismo, hecho que logran después de años de práctica y experimentación buscando la perfección laboral como fuente de satisfacción y realización personal… Sus carreras también están sujetas a ese perfeccionismo.
Además, este tipo de trabajadores se encargan de seleccionar experiencias que los enriquezcan tanto intelectual como emocionalmente. Entienden el aprendizaje como un proceso social. De hecho, su vida profesional es un ciclo continuo de aprendizaje y desaprendizaje en el que cooperan, comparten y tejen redes sociales. No tienen miedo de cometer errores, y continuamente están explorando nuevas alternativas, atreviéndose a correr riesgos y experimentar. Saben que también pueden aprender si las cosas no les salen según lo planeado.
A pesar de todo lo que pueden aportar los Knowmads a las empresas, éstos no encajan bien en las estructuras, sistemas y culturas de muchas organizaciones. De hecho, se trata de uno de los desafíos a los que deben hacer frente los líderes de estos negocios. Y muchas veces no saben cómo hacerlo. Sin embargo, son conscientes de que necesitan atraerlos y vincularlos… aunque no terminen de entenderlos y los necesiten para poder prosperar.
Por encima de todo, se trata de una cuestión de ajuste cultural. Al final del día, los Knowmads buscan las mismas cosas que cualquier otra tribu nómada a lo largo de la historia: espacio y libertad. Estos profesionales quieren tener autonomía para ejercer su iniciativa y creatividad, y establecer redes de relaciones interpersonales a través de las cuales compartan información y realicen su trabajo. Quieren tener libertad para mejorar la forma en que se hacen las cosas, reemplazando los métodos de trabajo existentes por otros más eficientes y ágiles.
También buscan tener la posibilidad de usar habilidades que de otro modo permanecerían sin explotar; ampliar sus áreas de responsabilidad para incluir otras actividades; y atraer relaciones laborales que les permitan aprender cosas nuevas o tener un mayor impacto.
El desafío real para las empresas consiste en romper con las estructuras rígidas e incambiables para acoger a los Knowmads, los trabajadores del futuro.
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